¿Celos?

Soy celosa. Celosa de todos y todo.  Así no haya motivo significativo por el cual deba estarlo, y yo lo sé, siempre termino demostrando lo resentida que estoy con esa persona.
Algunas veces la molestia es mínima; otras, es relativamente considerable. Para cualquiera de las dos tengo métodos distintos al momento de expresar mis achares, pero el quedarme callada nunca es una opción; primero, porque no es bueno que guarde aquello que siento, no me hace bien; y segundo, porque así trate de hacerlo, siempre quedará presente en mi memoria, y en alguna otra oportunidad que tenga, lo “sacaré a la luz” con mayor fastidio del que pude sentir al principio.

Si bien los celos no son buenos ni malos (para mí), la mayor parte del tiempo estarán presentes en alguna situación se quiera o no, y es ahí cuando hay que saber cómo se pueden manejar para que, en vez de causarle incomodidad a la persona que se cela, esta lo vea como algo tierno y quizás bonito.
Yo aún no sé manejarlos del todo, y muchas veces opto por el camino equivocado, pero estoy aprendiendo poco a poco, y por lo menos ya tengo claro que existen otras formas de expresarlos, y que la mía no siempre, por no decir casi nunca, es la adecuada.

Una de estas formas es el maquillarlo con una broma. Dicen que entre broma y broma la verdad se asoma, así que esto es lo que hago cuando mis celos no tienen mayor relevancia.
Por ejemplo; cuando una amiga, una de las mejores, aquella con la que salía casi siempre y ahora ya no tanto, me empieza a contar que se ve con fulanita, una persona que ambas conocemos también, o tal vez una nueva amiga suya. En ese momento yo solo digo “¡Ah, mira tú! Tu nueva mejor amiga, seguro” seguido de una pequeña risa. Ella, naturalmente, ya sabe que en realidad sí me pongo celosa porque yo antes era con la que salía o hablaba más, pero ahora ya no; sin embargo, no es algo que en realidad sea motivo ni de conversación, ya que sería ridículo molestarse porque “te quitaron a tu mejor amiga”. Ni que estuviéramos en primaria.

Otra forma es decirlo serenamente. Si eres una persona pasiva o ya aprendiste a controlar tus impulsos, seguramente lo puedes hacer. También lo hacen aquellas personas que recién empiezan una relación. Por ejemplo; llevas un día con tu novio y ves que millones de chicas le escriben en Facebook y le ponen cosas como: “Te extraño, lindo”, “Ya quiero verte, gordo”, “Por eso te amo y eres mi mejor amigo, mi amor”, “Cásate conmigo”, “Hay que salir más seguido”, etc. Y OJO, solo son amigos; ¡ah! Y aparte de eso, ves fotos en donde tu novio sale rodeado de puras mujeres en una fiesta que fue un día antes que te diga para estar. Y bueno, tú, como no quieres que piense que eres una celosa loca controladora stalker tumbalafiesta, le dices tranquilamente aquello que te incomoda. Lo dices con un tono suave y sutil; ni si quiera se lo dices, solo se lo mencionas, como quien no quiere la cosa. Él, posiblemente te entienda, como puede que no, y si no lo hace, te fregaste; te lo tragas. Cuando tengas más tiempo con él, seguramente se lo sacarás en cara, o tal vez no.

La forma más común es la de molestarse y decir con un tono un tanto elevado lo que te molestó. Los celos son tantos que no puedes contenerte  y simplemente debes soltar lo que tienes dentro. No solo lo escupes, lo vomitas.
Necesitas que te den una explicación clara y sólida del por qué lo hizo. Y conste que no solo hablo en casos de relaciones de pareja. Esto puede ocurrir en cualquier otro contexto.
Si bien es normal que esto suceda entre parejas, a mí me ha pasado con mi papá. Cuando veía que yo ya no era su engreída, se lo dije como me salió. Le exigí que volviera a tratarme como antes, que me engría solo a mí, que me saque a pasear solo a mí, que me compre cosas solo a mí, y que tenga ojos solo para mí. Obviamente, él no me hizo caso, no estaba bien lo que le pedía, y tampoco fue la manera adecuada, pero si era la primera que encontré.
Debe ser por eso que, ahora, cuando me pongo celosa por algo que tiene que ver con mi novio, casi siempre lo manifiesto de esta forma, pero, como dije antes, estoy aprendiendo a controlarme; poco a poco.

 

Recalcando lo que mencioné antes, los celos no son buenos ni malos, simplemente hay que saber si realmente vale la pena ponerse celoso por algo, y si es así, se debe buscar la mejor forma de expresarlos.
Claro está que si no eres tú el que se pone celoso, sino al que celan, en buena hora. Así que ya sabes, si estás celoso por algo, devuélvele con la misma piedra. ¡Ja!